Educación · ANPE propone un plan de estabilidad para quienes no logren plaza y el STEC plantea un concurso de méritos solo para Canarias
27.000 docentes de la enseñanza no universitaria canaria vuelven hoy a los centros educativos. Tras tres inicios de curso marcados por la covid, primero, y la acelerada implantación de la reforma educativa en las aulas sin currículos y sin formación después, el de este año se presenta, a priori, más tranquilo. Salvo para el alto porcentaje de interinos.
Los dos sindicatos docentes mayoritarios en la enseñanza canaria, ANPE y STEC, sitúan el proceso de estabilización de este colectivo como el reto con mayor incertidumbre de este curso respecto al objetivo de que las plazas convocadas en las islas sean para el profesorado canario.
Alcanzar una inversión del 5% del PIB para aumentar la calidad y cumplir la Ley Canaria de Educación, bajar ratios, formar y acompañar al profesorado para terminar de aplicar la nueva ley en las aulas o la demanda de ampliar la oferta de plazas de 0 a 3 años en los colegios públicos son otros de los temas en la hoja de ruta de los representantes del profesorado de las islas.
«Es una vuelta al cole con menos incertidumbre que el curso pasado, ya hay currículos y sabemos a los que nos enfrentamos, pero esperamos que haya más formación», señala Pedro Crespo, presidente de ANPE Canarias, respecto a la Lomloe, que ya se implanta de lleno con la entrada de los cursos pares.
«La gente ya sabe a qué atenerse. Aunque hace falta asesoramiento por parte de la Consejería, nada que ver con el curso pasado, que hicimos programaciones con los borradores», coincide Gerardo Rodríguez, portavoz del STEC.
En materia laboral, el proceso de estabilización del profesorado interino es el reto «prioritario». Los sindicatos se lamentan que al ser un sistema en el que «se estabilizan plazas y no personas» se corre el peligro de que interinos de las islas que llevan años trabajando no se conviertan en funcionarios, sobre todo en el concurso de méritos, en el que Canarias oferta casi 4.000 plazas y el 57% de los más de 25.000 aspirantes son de fuera de Canarias. Pero ANPE y STEC tienen diferentes propuestas.
Crespo huye del «alarmismo» y cree que hay que esperar a que se resuelva el concurso, en una fecha acordada dentro de la mesa sectorial de educación, y articular un «plan de estabilidad» para buscar «una salida al profesorado interino que no logre plaza en el proceso de estabilización», atendiendo a criterios de edad y antigüedad. Aún así, destaca que la normativa de las listas de empleo «favorece ya mucho la estabilidad del profesorado interino».
El STEC va más lejos y aboga por articular un concurso de méritos exclusivo para Canarias, tumbando el que está ya en marcha, utilizando su condición de region ultraperiférica.
«Hay muchas solicitudes de fuera de Canarias y es probable que muchas personas que llevan muchos años dando clase en las islas puedan verse relegadas porque están en condiciones de desigualdad respecto a los de otras comunidades autónomas», sostiene Gerardo Rodríguez en referencia a que hay especialidades donde no se han convocado oposiciones y no podrán tener los puntos por este concepto.
El plan b que propone el STEC es un borrón y cuenta nueva. «Ya le entregamos un informe jurídico a Ángel Víctor Torres, creemos que si hay voluntad política puede hacerse», sostiene el sindicalista.
Menos estudiantes por clase
Más allá del proceso de estabilización, los dos sindicatos docentes ponen el acento en seguir bajando ratios para mejorar la calidad de la enseñanza.
«Se han hecho avances pero pedimos un calendario de negociaciones para establecer un plan plurianual de bajada de ratios que apruebe el Parlamento», explica Pedro Crespo.
Para el STEC, es necesario aumentar la plantilla y cree que Canarias arrastra un déficit de 4.000 docentes respecto a otras comunidades con similar número de estudiantes. «Eso ayudará a bajar ratios, sobre todo en Primaria, ESO y Bachillerato», destaca Rodríguez.
Actualmente, en Canarias las ratios globales en la enseñanza pública están situadas en los 20 escolares por aula en Infantil de 3 años; 23 en los de 4 y 5; 25 estudiantes en Primaria; 27 en primero y segundo de ESO; y 30 en tercero y cuarto de la secundaria obligatoria y en Bachillerato.
También coinciden los dos sindicatos docentes en la exigencia de aumentar las plazas en colegios públicos del primer ciclo de Infantil hasta generalizar este ciclo educativo, y rechazan de lleno que la tasa de escolarización de 0 a 3 años suba con un modelo de concertación de plazas privadas.
ANPE incide además en la necesidad de «disminuir la burocracia» a la que se enfrentan los docentes e invertir en infraestreructuras, dando sombra a patios y canchas y «eliminando barracones».
El STEC plantea además la necesidad de abordar la sostenibilidad de los centros y la creación de nuevos colegios e institutos, «sobre todo en las zonas al sur de las zonas capitalinas, donde muchos están a tope de capacidad».
Fuente: canarias7.es