El sindicato STEC tacha de «desastroso» el concurso de méritos, la primera fase del proceso de consolidación docente en la comunidad autónoma.
El concurso extraordinario de méritos ya tiene resultados provisionales. De las 676 plazas convocadas en este primer proceso cántabro de estabilización docente, 217 las ocuparán interinos con arraigo en el sistema educativo cántabro (32,1%), según los datos que maneja la Consejería de Educación y FP, por el que el resto, un 67,9%, irán a parar a interinos que trabajan fuera de la comunidad. Además, hay 56 docentes con experiencia en la región que han logrado plaza en otras autonomías en virtud de este concurso estatal coordinado por el Ministerio.
En cifras
676 plazas estaban convocadas solo en el concurso de méritos extraordinario
886 plazas de estabilización se han convocado sumando el concurso-oposición extraordinario.
El resultado del concurso, apunta STEC, se dejará sentir en las aulas y en las plantillas. Por un lado, el próximo curso habrá una «pérdida de trabajo de varios centenares de docentes que hasta ahora venían trabajando en situación de interinidad en la región». Por otro, «Cantabria pierde capital humano formado aquí, con amplia experiencia en nuestro sistema educativo, que será sustituido por profesorado procedente de otras comunidades autónomas», sin conocimiento preciso de «nuestra realidad y nuestro currículo», denunciaron Gómez y Mitxelena.
Cantabria es una de las comunidades «peor» posicionada en cuanto a retención de sus interinos en esta fase de estabilización docente, al contrario que territorios como Castilla y León o Asturias, lamenta STEC, que, sin embargo, cree que aún hay margen de mejora.
Así, y a pesar de que son «tiempos complicados» a raíz de las elecciones del 28M, el sindicato propone a Educación tres vías para «paliar» esa pérdida de trabajadores y de experiencia a pie de aula. En primer lugar, plantea que las posibles vacantes que queden el aire tras la resolución definitiva del concurso se adjudiquen entre los aspirantes que hayan solicitado Cantabria como primer destino. En segundo, propone que no se excluya a ningún aspirante de otros procesos selectivos hasta que no se formalice la toma de posesión como funcionario (no antes de septiembre). Y, en tercer lugar, pide verificar que la baremación de los aspirantes sin arraigo sea acorde a los criterios exigidos en la región.
Esta es una de las claves que explica la situación: otras comunidades han puntuado cuestiones sin peso en el baremo cántabro –por ejemplo, haber aprobado una oposición previamente–. Así, más allá de la excepcionalidad de las comunidades con lengua propia, en el proceso han pesado cuestiones como el tamaño territorial, el número desigual de plazas convocadas en cada autonomía, la falta de baremación común o de supervisión ministerial. En defintiva, STEC cree que hay muchos factores que han aliñado un cóctel discriminatorio.
Estabilización y reposición
Educación ha incidido siempre en que tenía que garantizar la legalida del proceso. Con todo, ha convocado hoy una mesa técnica para estudiar posibles soluciones a las plazas que queden desiertas en el concurso, que solo es el primer paso de un proceso de consolidación docente cuyo objetivo es dejar la temporalidad en el 8%. Esta meta deriva de un mandato de la UE, que exigió a España rebajar sus altos porcentajes de interinidad en el empleo público. El Gobierno central, con una ley de medidas urgentes, y las autonomías se pusieron a ello.
En junio se celebra el concurso-oposición extraordinario, con el que se adjudicarán 210 plazas más, hasta sumar 886 puestos de estabilización. Además, en 2024 se ejecutarán 422 plazas de reposición de Secundaria y en 2025, llega la reposición de maestros.
Fuente: eldiariomontanes.es