Educació defiende que la medida evitará dejar “alumnado desatendido” y permitirá adjudicar “sustituciones más largas”
Los profesores interinos ya no podrán elegir en qué municipio quieren dar clase a partir del próximo curso. El Departament d’Educació ha comunicado a la mesa sectorial que a partir de ahora la petición mínima que se podrá realizar en bolsa es la comarca, eliminando la posibilidad de poner municipios ordenados por orden de preferencia.
Así, defiende que se evitará dejar “alumnado desatendido” y permitirá adjudicar “sustituciones más largas” para los solicitantes.
Desde la Plataforma de Interinos de Catalunya (PINDOC) han valorado negativamente la decisión, lamentando que quieran hacerles pagar “la mala jugada”.
“Hasta ahora podíamos acotarlo según nuestros intereses, quieren hacernos hacer a nosotros el trabajo sucio”, remacha su portavoz Víctor del Arco.
La falta de profesores sustitutos, nuevo foco de tensión en los institutos catalanes
Cada semana quedan vacantes decenas de plazas para cubrir bajas de especialidades como inglés, catalán o informática
Mientras en la Conselleria de Educació insisten en que el Departament cuenta con la plantilla más grande de profesores de su historia, son muchas las voces de claustros de centros educativos y asociaciones de familias que denuncian la falta de docentes sustitutos en algunas especialidades, situación que roza lo insostenible en los ciclos formativos. Un escenario que repercute directamente en la educación que recibe el alumnado.
“Es compatible lo uno con lo otro; una cosa es que en el conjunto del sistema tengas más profesores que nunca, que es posible; y otra muy distinta que esa cifra sea suficiente y que sean los profesionales que necesitas”, resume la situación Lidón Gasull, directora de Affac, la principal asociación de familias de la escuela pública catalana. Situación que en muchos centros se traduce en forma de semanas sin sustituto de catalán, matemáticas o alemán, con la afectación que eso tiene tanto para los alumnos, los principales damnificados (aunque a veces ellos no lo sepan), quienes pierden en esas clases, pero también para el resto de profesores que tienen que hacer lo imposible para que esas criaturas no queden desatendidas.
Un ejemplo: en las listas de nombramientos -proceso que se hace dos veces por semana para asignar las vacantes entre la bolsa de docentes sin plaza- del pasado 6 de febrero en el Servicio Territorial del Vallès Oriental-Maresme, plazas y plazas acompañadas de un número cero. Es decir, que no ha salido nadie para cubrirlas. Matemática, Física y Química, Tecnología, Catalán, Cultura Clásica, Frances… cero, cero, cero, cero, cero y cero.
Horas de más
Tras cada uno de esos ceros, una media de 25 críos sin profesor de cada una de las materias, y un claustro un poco más tensionado, teniendo que cubrir esas vacantes durante sus guardias. Una situación que está llevando a muchos profesores a dar clase de materias que no son su especialidad en horas de guardia para que el alumnado no sufra las ausencias, haciendo más horas lectivas de las que debería durante días o semanas (hay bajas cortas y bajas largas).
Cuando se dan estas situaciones -cada vez que un compañero de una de las especialidades de las que la bolsa anda corta cae enfermo- se encuentran con la paradoja de sentir que casi ha sido peor el remedio que la enfermedad: el acuerdo para reducir una hora lectiva a los docentes ha llevado a la contratación de 3.566 profesores de golpe, vaciando la bolsa de ciertas especialidades, haciendo que, en la práctica, en no pocas ocasiones tengan que hacer más horas lectivas. Algo, que los docentes insisten en achacar “otra vez” a la falta de planificación del Departament: “El problema no ha sido la contratación, por supuesto, siempre hacen falta más docentes, el problema ha sido la manera cómo se ha hecho, sin tener en cuenta las consecuencias“, reflexiona la jefa de estudios de un instituto público.
“Las bolsas de profes de prácticas están vacías en el sector industrial, no solo para los sustitutos”, señala Miquel Casa, profesor del Instituto Llobregat de L’Hospitalet, centro especializado en FP que hasta este lunes -con un mes y medio de retraso– no ha podido contar con el medio profesor de Fabricación Mecánica que le tocaba en el reparto de los 3.566 docentes de enero.
Cuestión de condiciones
“El sistema educativo tiene un problema de falta de profesores de determinados perfiles profesionales porque la profesión no está bien remunerada. Es muy difícil encontrar especialistas de perfiles muy concretos que en el mundo privado sí están bien pagados, como matemáticas o informática”, sentencia Gasull.
Fuente: elperiodico.com