El ministro Transformación y Función Pública, Stanislas Guerini, prepara un proyecto de ley para «mejorar la eficacia de la función pública». Uno de sus objetivos es aumentar la remuneración de los funcionarios de acuerdo con sus méritos y facilitar el paso de una sector a otro dentro de la Administración. Sin embargo, también quiere abordar la agilización de los despidos. Aspira a «levantar el tabú» sobre esta medida, sin que signifique abrir la puerta a despidos por motivos económicos, sino por incompetencia profesional (según el ministro, en el 2023 solo hubo trece casos de un total de 2,5 millones de funcionarios), o por incumplimientos de horario y absentismo (200.000 funcionarios trabajarían menos de las 1.607 horas al año previstas por la ley).
En otra entrevista posterior a la emisora France Inter, el ministro ha subrayado que el despido por motivos económicos para los funcionarios no existe y él no quiere cambiar eso, pero también que el estatuto de funcionario tampoco significa que “no se puede despedir a alguien que no hace bien su trabajo”.
Considerar que “en nombre de la garantía del empleo no se puede echar a un trabajador público que no hace su trabajo es una mala interpretación del estatuto de funcionario”, argumenta en estos medios en declaraciones recogidas por Efe. “Lo justo es recompensar a los que se comprometen y sancionar a los que no cumplen suficientemente con su trabajo”.
Guerino ha recordado que el despido de un funcionario por insuficiencia profesional está recogido en el Código de la Función Pública, pero el texto es impreciso y en la práctica no se aplica casi nunca”. El año pasado, ha recordado, que recuerda que el año pasado se utilizó tan solo en 13 ocasiones en la Administración Central, en la que trabajan 2,2 millones de funcionarios.
En una primera reacción a las palabras del titular del Ministerio, la responsable de la Confederación General del Trabajo (CGT) de los funcionarios, Natacha Pommet, ha calificado su intervención de “simplemente vergonzosa”.
Pommet ha surayado que el asunto de los despidos públicos es “una línea roja”, ya existen procedimientos y que cuando se observa esa situación con un funcionario lo que hay que hacer es “acompañarlo para ver por qué” y solucionarlo con formación.
Stanislas Guerini (París, 14 de mayo de 1982) es un político francés que ejerce como ministro de Transformación y Servicios Públicos en el gobierno de los sucesivos primeros ministros Élisabeth Borne y Gabriel Attal desde 2022.
Antes de entrar en el gobierno, Guerini ejerció como oficial ejecutivo de La République En Marche! (LREM) desde el 2018. Sucedió a Christophe Castaner, que había dimitido tras ser nombrado ministro del Interior por el presidente Emmanuel Macron. De 2017 a 2022, Guerini fue miembro de la Asamblea Nacional para la 3ª circunscripción de París, que cubre partes de los distritos 17º y 18º. Stanislas Guerini se graduó en HEC Paris en 2006.
Fuente: lavozdegalicia.es | es.wikipedia.org | expansion.com 14.04.2024